Tarta de queso sin horno con mermelada de frambuesa casera

Imprimir

Pasos

• Trituramos las galletas. Podemos picarlas en una picadora o meterlas en una bolsa para congelar y aplastarlas con un rodillo. A continuación las mezclamos bien con la mantequilla derretida y las extendemos en el fondo del molde, hasta tener una superficie lisa.
• Metemos el molde en el congelador o en la nevera para que se enfríe y no se mezclen las galletas con el resto de la masa de la tarta.
• Hidratamos 5 hojas de gelatina en un vaso con agua durante 10 minutos y mientras tanto calentamos la leche. Cuando tengamos la gelatina hidratada, escurrimos las hojas y las metemos en la leche caliente. Removemos bien hasta que se disuelvan por completo.
• Batimos el queso con unas varillas y a continuación añadimos también el yogur, la leche caliente y el azúcar. Seguimos batiendo hasta obtener una mezcla homogénea. Vertemos con cuidado sobre una cuchara la masa en el molde, sobre la base de galletas y la dejamos enfriar 4 horas en la nevera.
• Para la mermelada:
• Lavamos las frambuesas y las echamos en un cazo con el azúcar y con un chorrito de limón. Lo ponemos a fuego medio y removemos poco a poco. Las frambuesas se van a deshacer y licuar. Dejamos 20 minutos mientras removemos y sacamos del fuego. A continuación hidratamos una hoja de gelatina durante 10 minutos y mientras tanto pasamos por un colador la mermelada para quitarles las semillas. Vamos echando la mermelada sobre el colador y removiendo con una cuchara para colarla y separar bien las semillas de la pulpa.
• Escurrimos la gelatina y la echamos en el cazo junto a las frambuesas coladas. Seguimos cocinando a fuego medio otros 5 minutos.
• Sacamos del fuego, esperamos a que enfríe y echamos la mermelada sobre la tarta de queso con cuidado sobre una cuchara.
• Dejamos reposar en la nevera para que espese la mermelada.